"Cada cual tiene sus gustos... y para gustos los colores".

Esta frase me la han dicho en alguna ocasión cuando he hecho algún 

comentario sobre algún tema de alimentación.

Y es que pienso que cuando se trata de digestiones o de comer, ya no es cuestión de gustos, 

es cuestión de saber qué necesita el cuerpo y cómo funciona nuestro organismo.

Te sorprenderías, y mucho, si conocieras los secretos que guarda el cuerpo.

¿Sabías que un 25% de la población de este país padece alguna intolerancia 

alimentaria?

¿Y que cerca de un 30% sufre acidez o reflujo de estómago?

¿O que un 25% de la población padece de alguna enfermedad digestiva crónica?

Vaya, que aquí no se salva ni el Tato. Incluso según mi experiencia yo aumentaría los 

porcentajes bastante.

Bastante y mucho.

Pues aún así, mucha gente se empeña, erre que erre, en no darle importancia a tener una 

buena salud digestiva y llevar un buena alimentación.

"No le veo relación y eso son modas".

Yo me sorprendo, la verdad.

Pero vamos a ver alma de cántaro, si tienes un problema digestivo, (me da igual

donde sea) ¿Cómo no va a estar relacionado con lo qué comes?

Es que es de cajón.

Tanto el sobrepeso, las depresiones o las alergias están directamente relacionadas con el

intestino.

O dicho de otro modo... 

Si queremos sentirnos bien con nuestro cuerpo, vivir más y mejor y ser más felices 

debemos si, o si, saber qué comemos y cuidar nuestro sistema digestivo, y especialmente 

el intestino.

Esta es la clave.

Y hay una forma de aprender sobre digestiones y su relación con la Nutrición

sin tener que perder el tiempo buscando por Internet...

No digo de ver un vídeo en Youtube o leer un post en Instagram, me refiero a 

aprender entendiendo lo que haces y porqué lo haces.

Y esto hace una gran diferencia.

Por regla general, queremos aprender cualquier cosa como si estuviéramos en Matrix. 

Vivimos en la era del consumo de información rápida y creemos que esto también se 

puede llevar a la salud y a comer.

Ojo, que lo mismo todo esto te importa menos que una lechuga. Por mi perfecto, puedes 

seguir tu camino y seguir utilizando Google. 

Para las demás, las que quieren aprender de verdad, en el botón de aquí debajo.

Así de sencillo.